25 de julio de 2007

-alo?-

Una se sube traquilamente al bus que le llevará hasta la Colón y 6 de Diciembre como a las doce y media del día.
Escoge el asiento donde el sol esté pegando más duro... (sí... una es de las que les gusta chamuscarse en el lado del bus donde quema el sol del medio día) y empieza a ver como la vereda se va moviéndo por la ventana.

Hace un par de semanas que ya no tiene teléfono móvil que es lo que le ha hecho descubrir como la gente anda con sus teléfonos por todos lados y por sobretodo en el bus.

Sentada en el asiento chamuscante una puede escuchar el tono monofónico o polifónico del hombre que está sentado a unos pocos asientos (en el lado de la sombra) atrás. Y escucha que está aconsejando a la persona que lo llamó que consiga un abogado, que "eso no se puede quedar así".

Unos minutos después, el tono polifónico del reggeton de moda hace su aparición, un muchacho que seguramente tiene la misma edad de una, o tal vez unos años menos, habla con su "pana" al que le dice que se verán en unos minutos en "la zona".

El Chofer obviamente también tiene un celular. Este suena al ritmo de la nueva canción del artista ecuatoriano en fama con tendencia a la alta.
Le dice a la persona que le llama que está a siete minutos de la Plaza Artigas, que le espere, que no se preocupe que si el dice siete minutos son siete minutos.

A la final una se da cuenta que realmente necesita un nuevo teléfono móvil, porque eso de estar escuchando las conversaciones de otros como que no es (tanto) de su agrado.

6 comentarios:

Carlos dijo...

...haga como yo mija, 2 años sin celular...uno se acostumbra :P

Unknown dijo...

No mienta compadre, que usted (y el inefable Danny) tienen cel compartido :p

Chopán dijo...

mmm.. yo por el momento no hago mi vida sin celular.. aunque hace algun tiempo andé sin celu como por tres meses y diga que fue muy relajante...

LaÜ dijo...

uno sí que se hace dependiente de ese aparatito... yo cuando salgo sin él, me angustio full...

cralvbenalc dijo...

haga como uno y lleve un librito para amenizar el viaje

El Apestado dijo...

A los que nunca nos llaman, esa es aveces la única conversación a la que nos podemos acercar..