-¿no te enteraste? tuve otro bebé!-

Y bueno... Este es un pequeño update de lo que ha pasado este año sin postear.

Lo que más puedo sacar a relucir sobre el año que acaba de pasar es mi embarazo y parto, tuve a mi primer segundo hijo. Es un varón, nació el 31 de mayo a las 7.50am midió 53cm y pesó 7.1lbs.

Se llama Illidan. (si no sabes quien es Illidan, porfavor haz click aquí).

Quedarme embarazada de nuevo fue una impresión muy fuerte. Un mes antes de saberlo, el Lobo y yo habíamos hablado de cuan hermoso y divertido es poder hacer las cosas junto al Demoño, que es ahora un niño grande (8) e independiente y por sobre

todas las cosas, es un niño EDUCADO.

Junto al Demoño podemos hacer montones de cosas, salir a comer, salir a conciertos, ir a la casa de los panas, ver películas juntos, ir al cine, etc... Entonces decidimos que debíamos esperar siquiera unos 5 añitos más para tener un bebé.

Así que decidí que iría a ponerme ese anticonceptivo sub-cutáneo, que me duraría 5 años.

Un mes después, estaba yo encerrada en el baño de mi cuarto, con una prueba de embarazo que había dado positivo.

Lloré y lloré y lloré y le llamé llorando al Lobo a seguir llorando y a avisarle que estaba embarazada.

¿Qué hacer? Ya habíamos decidido no tener hijos... Y de repente ahí estaba la vida dándome un chirlazo, recordándome que no debo hacer planes, que debo vivir sobre la marcha.

Pasaron dos semanas de inestabilidad total, de indecisión, de miedo y felicidad, de confusión...

Y una noche, yendo a acostarle al Demoño, miraba su carita y sus ojitos cerrados, y lo recordé bebé. Recordé su carita y sus risitas, y me invadió la ternura maternal.

Después de todo, cuando lo tuve a él, la situación era complicada, tenía 17 años, no me había nisiquiera graduado del colegio, no tenía una pareja estable, y en cuanto a madurez (aunque yo me creía ya madura) estaba muy lejos de serlo...

Pero ahora todo estaba mejor, tenía 25 años, y aunque n

o me había aún graduado de la Universidad, por lo menos ya tenía mi pareja estable y me sentía más madura para asumir el reto de ser mamá.

Y ahí me decidí. Tendría a mi bebé.

Tuve un bonito embarazo, esta vez al haber cambiado la situación, recibía felicitaciones en vez de puteadas. Y eso fue lindo.

Intenté dar a luz en agua. Conocí sobre el Parto Humanizado y quise ser parte de ello. Pero por esas cosas de la vida, no pude dilatar y mi bebé nació por cesárea.

Y ahí estaba él, hermoso como sólo él podía serlo.

Lo primero que dijo su hermano mayor apenas lo vio fue "¡mira si es hasta más bonito que yo!".

Mi Demoño estaba feliz. Saltaba y brincaba para todos lados, la emoción se le desbordaba y los ojos le brillaban. Se subía y se bajaba de la cama, me besaba, besaba a su ñaño, volvía a salir corriendo por el pasillo, regresaba otra vez corriendo y volvía a subirse a la cama.

Nos asustamos... Yo recién operada y el bebé recién nacido, y el Demoño como loco! Así que terminó la hora de visita y tuvo que irse a la casa de los papás del Lobo, al saber que se iba empezó a llorar y a gritar "¡PERO SÓLO HE SIDO HERMANO 10 MINUTOS!". La ternura me sobrepasaba... pero igual tuvo que irse.

Illidan ha crecido muy bien. Es un niño super activo y super pilas. Para muestra un botón: