Paz en la tormenta...

Con todos estos días de tormentas personales, me había olvidado lo hermoso que es estar en paz.

He resuelto en gran parte la mayoría de los lios que tenía y que me estaban revolviendo las ideas creándome más que tormentas, huracanes de ideas problemáticas que no sabía como resolver.

Pero! Resolví lo de la escuela del Demoño y ahora su papá y yo nos hablamos normalmente otra vez, resolví mis problemas de relaciones abiertas, y terminé una "relación" en la que me estaba sintiéndo el trompo que bailaba en las manos de un esbirro que pretendía ver hasta donde podía llegar conmigo y me cansé de ser trompo, y me convertí en fiera y desgarre esa relación y la destroce, y ahora no quedan más que un par de recuerdos en forma de bytes, que pueden ser destruidos con un solo botón de mi teclado.
Además resolví el acertijo de desactivar mis mecanismos de seguridad y dejarme de tantos miedos, y entregarme no más al amor... (si... vuelve la burra al trigo... y por cuarta vez!)
La paz es tanta que hasta me hice de a buenas con Dios hoy...
Y por último y más importante, pude hablar con mi Papito precioso, que estaba enojado conmigo por lenguas viperínas que fueron a envenenarle los oidos de cosas terribles "que disque yo he dicho" pero bueh... "I have come back to my senses..." y ahora nos amamos de nuevo. Así que se me abren de nuevo las puertas del Gran Guayas, así que Adorado prepare ese rock & blog's que le juro que esta vez si puedo asistir! :D

Entonces con problemas resueltos y en paz en mi tormenta y al parecer en las tormentas personales de quienes quiero resueltas, me puedo ir a dormir tranquila.

Y yo que pensaba que tenían que llevarme al viejo hospital de los muñecos, para que llegue el hada protectora y me ponga un corazón de fantasía... Así todo hubiera sido más fácil... Pero prefiero tener mi corazón real y sentir con el todo lo que tengo que sentir.